El entintado blondo que Valentina Jewels lució en Nympho es el epítome de una reciclada moda que las pornostars utilizan para aumentar su complicidad con la comunidad pornera. No hay nada como pasarse al rubio y tener ese aspecto de mujer sucia que desde cualquier angulo transpira sexo para cosechar fama y notoriedad. Ya lo vimos en la segunda vuelta con Bonnie Rotten, como ese aspecto de loba insaciable se potencia con mechas descuidadas. Eso si, aunque su cabello haya sufrido algún que otro cambio, el culo de valentina sigue intacto. La pornostar conocida por tener un trasero tan tembloroso como un flan (es capaz de chocar los glúteos emitiendo un chasquido cárnico) mantiene unos muslos gruesos con los que realizar escenas con mucho movimiento y multitud de acrobáticas posturas sexuales.
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