Es desconcertante el secretismo en el que se ve envuelto la carrera de la pornostar Uma Jolie desde que abandonara la dieta de la almeja para pasarse al porno heterosexual. Ya nos hicimos eco de su fallido primer interracial —una escena que ha sido grabada con muchísimo recelo (todavía no sabemos el nombre del suertudo afrosemental) pero que sigue guardada por algún cajón esperando el momento adecuado para publicarse como es debido — en una carrera del todo irregular llena de vaivenes, de falta de información y sobre todo de un insoportable desconocimiento en todo lo que hace. Recientemente incursionó por Nympho de forma tan discreta y escondida que casi podemos decir que no fue culpa nuestra que se nos pasara por alto. Lástima que su agencia no la publicite como bien se merece su gran atractivo, porqué a belleza felina de ojos increíblemente claros no la gana nadie.