De los Países Bajos se ha exportado satisfactoriamente tres cosas: la corriente filosófica del humanismo, los tulipanes y las escenas porno amateur de la famosa webcamer Siswet. Con más de 125 millones de reproducciones de vídeos en su canal de PornHub, la camgirl Siswet se ha convertido en una icónica practicante de los gapes anales y espeoleóloga de su propio recto con millones de seguidores por todo el mundo. Su secreto, haberse convertido en un agujero negro rectal y una especialista en introducirse por el ano todo un arsenal de juguetes sexuales de tamaño XXL. No en vano, recientemente fue premiada en la infravalorada categoría de «Top Anal Performer» en los premios Pornhub Awards 2020.
Y es que Siswet ha llegado a la la cúspide del porno amateur por padecer una obsesión enfermiza con la masturbación. Estamos ante una bestia desinhibida cuya capacidad de dilatación de su esfínter hace llorar al niño Jesús, al menos es lo que sentimos cuando vemos su triple y profundo fisting anal. Dildos, máquinas sexuales, squirtings, fistings con puños, butt plugs gigantes… nada se le resiste a esta chica con inclinaciones por el sexo público y el rimming masculino.
Desde JaqueMateAteos ya advertimos a las lectoras curiosas que no imiten su estilo si no quieren morir en cualquier momento por desgarro vaginal o anal, por los delirantes tamaños que se inserta. Porque esto raya la patología, la parafernalia que se mete en su culo le tiene que causar una flojera que le obligue a ir en pañales toda su vida.