Una pornostar de mezcla sanguínea tan heterogénea como la criolla Sadie Santana bien se merecen una escena distinta al resto. Esta chica de perfil étnico que posee raíces hispanas y nativo americanas ha caído en las fauces de la web más terrible de Kink: Fucking Machines. Todo un sótano repleto de un ejército de máquinas folladoras que en cuanto se enchufan a una toma de 220 voltios bombean sin límite. Estas locomotoras orgásmicas prometen alcanzar el cielo y viendo las reacciones de sus empleadas cuando se someten a este duro placer nos lo creemos palabra por palabra. El paraíso fetichista de todo amante de la maquinaria industrial tiene una cita ineludible con esta escena donde una chica es follada por una máquina. No le queda mucho al transhumanismo donde la masturbación la realiza una I.A.
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