No tenemos constancia de que la legendaria pornostar Christy Mack haya vuelto al ruedo del porno americano. Al menos al sector más comercial y profesional de la industria, porqué sabemos desde hace tiempo que a través de la plataforma OnlyFans da rienda suelta a su sexualidad más amateur. Una de las primeras pornostars tatuadas y con el pelo rapado a lo Mohicano de aspecto pseudoalt y agresivo que no solo lucía sus entintados con garbo y soltura, sino que se hizo inmensamente famosa gracias a ellos. De esta forma la starlet marcó un antes y un después en la estética pornográfica y transformó el porno de arriba a abajo para convertirlo en un negocio más inclusivo y alternativo. Con semejante currículo es normal que tengamos mono de volver a verla en acción, como yonkis del porno que esperan su dosis diaria de sexo online.