Es muy difícil, por no decir casi imposible, tener la oportunidad de ver la primera escena porno de una actriz justo en el momento en que es publicada. Pero hoy hemos sido afortunados de contemplar el nacimiento de la checa Licky Lex, una pornostar cuya única escena filmada hasta el momento pertenece al sitio pornográfico Fake Hostel, de la network FakeHub. Maestros del engaño con su particular serie de pilladas en la calle aunque en este caso lo llevan al mundo de los hostales. El pimiento picante tatuado en su culo lo dice todo, es sinónimo de atrevimiento sexual cuando sale de vacaciones a Praga y hace fotos con su palo selfie. Y es que la curvilíena rubia de tonalidad canosa posee un apetito sexual insaciable y sus intensas actuaciones están asaltando la industria europea de adultos.