Pamela Morrison viene a refrescar el género pornográfico

Puede que el prólogo en la carrera de Pamela Morrison en la industria del triple X sea síntoma de que el porno esté virando hacia un rumbo más gesticular y menos estético. La novata que comenzó en 2017 tiene cara de malas pulgas y look motero, algo que choca de frente con la tendencia mainstream hacia lo bello que ha sido el arquetipo del negocio desde sus orígenes. Después de todo para gustar al pornófilo no es requisito tener una cara bonita cuando empiezas, basta con cierto grado de inexperiencia y actitud marcada para refrescar el género. La de Las Vegas tiene 20 años, ganas no le faltan y ya ha trabajado para Bang! Confessions y varías más. Veremos si se afianza con el tiempo o se apaga como la mayoría de feuchas que han venido a ganar dinero.