Es increíble lo que ha cambiado esta chica (para mal) desde que dejó su serie Disney «Hannah Montana». Pasó por una etapa de rebeldía adolescente que todos creíamos que se le pasaría, pero que desgraciadamente fue a más. Primero veíamos a Miley Cyrus desnuda sin tapujos, con su coño al aire, saliendo en las portadas de numerosas revistas de moda y del corazón. Una foto que para nada era un descuido, puesto que sus posteriores desnudos desvergonzados confirmaban que se había convertido en una golfilla televisiva. Posiblemente el coño más visto de toda Norteamérica este 2016.
Pero la cosa no quedó ahí, la actriz y presentadora juvenil fue subiendo de tono y comenzó a grabar vídeos porno donde se veía a una Miley Cyrus follando. Todo el mundo estaba asombrado, la que fue una vez una chica inocente y cándida se había vuelto una depravada que tenía sexo en orgías de negros.
La pequeña daba rienda suelta a su desmesurada sexualidad y se metían dos pollas al mismo tiempo. Las chupaba y les daba cobijo en su cuerpo de guarra. Miley es ahora una famosa ninfómana que tiene un grave problema de «Attention Whore».
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