Lola Ortiz Luque ha sido posiblemente la tronista más explosiva que ha pisado el plató de MyHyV (Mujeres y Hombres y Viceversa). Incluso más que la odiada Orian Marzoli. Hablamos de una canaria de silueta super voluptuosa, cuerpo rebosante de curvas infinitas y unas potentes tetas que la llevaron de paseo a todos los realities de Telecinco. Que ya es decir. Fue en el controvertido dating show de Mediaset España donde se convirtió en un animal televisivo que sedujo a la audiencia por puro aplastamiento anatómico. Sin duda, encandiló a los telespectadores tanto vestida como desprovista de ropa luciendo cuerpazo con bikini en las playas de «Supervivientes» 2015.
Y es que si bien el programa de Emma García la descubrió, fue en reality «Supervivientes» 2015 donde se consolidó como uno de los personajes televisivos que más han dado que hablar en las tertulias de Telecinco. La superviviente canaria revolucionó a los espectadores españoles con la sensualidad de su cuerpo. Algo de locos para una jovencita de 25 años. Tanto que, cuando salió desnuda en la web de Interviu, batió récords de audiencia y de venta de clínex.
De ahí que la atractiva canaria es carne televisiva por, precisamente, poseer unas armas de mujer extremadamente proverbiales. Un par de pechos que se han abierto hace poco tiempo una cuenta en OnlyFans para exhibirse como Dios manda: al aire y sin sujetador. Pero es que además, su actitud sexual no le va a la zaga, confesando en el desplegable interior de Interviu que se había masturbado en la isla de Honduras, vio la polla a su compañero de concurso Nacho Vidal, ha hecho tríos discotequeros y sufrió el dolor del sexo anal cuando una de sus parejas la sodomizó por error.
Con semejante historial sexual no nos extraña de que su portada de Interviu fuera la más vendida del año 2016, por encima de las fotos de Olvido Hormigos. Su verbo rápido y frescura mental son el añadido perfecto a sus posados desnudos, algo que también demostró en la revista Primera Línea en una sesión de fotos de lo más hot con Torito. Quien la haya visto sabrá que no enseña «felpa» porque iba totalmente depilada.
Un currículum profesional que no está nada mal para la que fue expretendienta de muchos tronistas masculinos. Más que nada porque este tipo de chicas suelen ser chonis y barriobajeras que acuden al mundo de la televisión para tener su momento de gloria. Pero Lola no es así. Ni siquiera ahora, con 30 años ya cumplidos, se la conoce solamente por presumir de silueta de guitarra española. Se ha consolidado como uno de los grandes personajes del grupo de Fuencarral, teniendo su propio espacio en el canal MTMAD. Para siempre jamás.
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