Los que los conozcan, aunque sea solo un poco, sabrán que una simple mamada no es suficiente para el cabrón de Mike Adriano. Al catador de traseros por excelencia del porno contemporáneo le gustan las mamadas realizadas a voluntad, de esas en las que hay que cubrir el sofá y el suelo con algo que absorba toda la saliva y la baba. De hecho, el asistente de producción recurrió a unas sábanas antes de que Sera Ryder y Brianna Arson llegaran a la guarida de Mike a demostrar sus increíbles habilidades orales, que no oratorias. Y es que al final de esta escena de sexo oral a dos bandas nominada en los AVN Awards, las dos mamonas nadaban literalmente en su propia saliva. No en vano, durante casi cuarenta minutos chupan, acarician, lamen, succionan las pelotas de Mike y le comen el ojete mientras cantidades ingentes de saliva brotan por sus mejillas y barbillas. Cuando Mike se vacía en sus rostros, resulta complicado diferenciar el semen de la saliva.
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