Tras el visionado de aquella sucia y seminal escena en «Kianna Dior Busty Asian Cum Slut #04» hemos comprobado como la filmografía de la asiática-americana se ha plagado este último año de vídeos relacionados con el arte de la mamada y la recepción de su correspondiente dosis de cuajada. Está claro que la deriva laboral de la pornostar hacia praxis orales va más allá del compromiso profesional si nos basamos en sus desbordantes muestras de pasión oral. Incluso podemos afirmar que la tetuda asiática padece de una extraña obsesión fetichista con todo lo relacionado con la simiente masculina o el semen blanquecino. Buena prueba de ello es su último trabajo, una escena que supone su primer bukkake rodado íntegramente en Japón (con 30 hombres nada menos), la tierra del sol naciente donde los hombres se pirran por las mujeres de busto natural generoso.
Os avisamos que la escena destila un estilo algo bizarresco por culpa de ese ejercito de actores japoneses con micropene. Aunque eso sí, están garantizados los sabrosos cocktels de esperma, copiosas mascarilla facial (con bandeja incluida para no desperdiciar ni una gota) y generosas corridas en la cara de Kianna, por algo el país oriental es la cuna y origen de esta legendaria práctica sexual humillante.
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