Que tengamos el honor de anunciar a bombo y platillo un anal de Kelsi Monroe es una noticia que, por desgracia, solo sucede una vez al año. La afamada pornostar de Miami rueda de uvas a peras por culpa de concatenar embarazo tras embarazado (ya ha tenido a dos churumbeles) y sus populares piruetas eróticas, en forma de sexys aperturas de piernas, están casi olvidadas. El pasado 2021 pudo hacer un hueco para acudir a la prestigiosa Brazzers y refrescar sus conocimientos de sodomía, sacando de paseo su mayor activo: un pandero de proporciones áureas. Hoy hace lo mismo para la sucursal de Reality Kings, donde comprobamos que sigue manteniendo uno de los culos más gloriosos y respingones que ha parido la industria de adultos moderna.
in Sodomía
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