Tengo que reconocer que la pornostar americana Sloan Haper apenas ha hecho ruido en la industria de adultos desde sus inicios en 2017. Lejos quedan ya sus correrías interraciales por las que se iba abriéndose paso a duras penas en este difícil negocio del sexo filmado, pero que por alguna razón no acabaron de cuajar. Puede que la culpa de su fracaso la tenga ese horrendo tatuaje debajo de su pecho derecho, un feo entintado que estropea al resto de su cuerpo (como poner un feo grafiti en una bella escultura). Una verdadera lástima sabiendo que estéticamente cumple su cometido y podría dar mucho más de sí. Al menos siempre hay quien se acuerda de ella y la contrata para rellenar algún hueco de verano, como nuestro espeólogo de culos Adriano, que ha contado con su presencia en Nympho. Todavía hay un halo de esperanza.
in Porno Gonzo