En JaqueMateAteos desconocemos si en los registros de la historia de la pornografía existe alguna referencia a pornostars que padecen albinismo; el trastorno genético que inhibe la melanina y otorga en las personas que lo padecen una piel blanquecina extrema. Lo que si sabemos es que la novata Haley Spades (22 años) es lo más parecido a una actriz porno con ausencia total de este pigmento encargado de dar color a la piel.
Y es que teniendo una tez lechosa y cabello platinado, sus principales credenciales visuales y una gran parte de su identidad, el éxito no es una posibilidad, sino una garantía. De ahí que todo su abanico estético se vuelva por arte de magia en factores decisivos para catalogarla como una starlet albina. Aunque no lo sea técnicamente y nos quieran engañar con maquillaje, iluminación y técnicas de cámara.
Una estrategia de marketing para darnos gato por liebre que ha resultado ser de lo más eficaz en estudios como Net Video Girls, Team Skeet, Bratty Sis o JaysPOV, donde esta incorporación estimulante causó una fuerte impresión porque su aniñada apariencia —casi parece una menor edad— invita a fantasear de forma inmoral.
Respecto al pasado de la rubia llamativa de la agencia Motley Models —uno de los establos de pornostars más importantes de EE.UU— decir que fue una stripper de Nueva Orleans durante varios años, y su única experiencia previa en el porno se produjo durante la pandemia, cuando produjo contenido en solitario para OnlyFans.
Con 1,42 m y un poquito de menos de 45 Kg, Spades se encuentra entre las artistas más pequeños de la industria de adultos. Rasgo físicos especialmente definitorios que no tiene porque ser un obstáculo, ya que algunos de los nombres más importantes del porno en los últimos años —la megaestrella Kenzie Reeves o Holly Hendrix, por nombrar algunos— han tenido marcos similares.
Loading…