El ocaso de la actriz de nacionalidad canadiense Nikki Benz es ya un hecho, y solo queda de ella un gran culo relleno de carne flácida. No nos equivoquemos, todavía sigue siendo una pornostar muy follable si gusta la cirugía plástica, pero ya no es ni la sombre de lo que fue. Actualmente su presencia no justifica rodar una escena porno y por eso le han puesto de compañera a la espectacular culona Abella Danger. Y es que «La Peligrosa» no solo tiene mucha menos edad que la MILF, sino que mueve sus nalgas mucho mejor que la zorra de alta alcurnia de origen ucraniano. Ambas forman el tándem ideal norteamericano que por separado ya lo han probado todo en el mundo de adultos.
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