Adiós a las turgentes y naturales tetas de Emma Hix. La nueva etapa de la actriz canadiense —a las pocas semanas de haber dado a luz— se caracteriza por haberse hecho un upgrade físico que la situa en la órbita de las MILFs. En concreto, unos nuevos pechos que confieren a la escuálida actriz una apariencia más genérica. Su segunda juventud acaba de ser expuesta en Team Skeet, una escena de gimnasio sin estridencias que nos oculta su otrora insaciabilidad sexual, cuando era una todoterreno preparada para recibir penetraciones múltiples. El público, que es soberano, decidirá si ha perdido (o no) su encanto.
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