Nos da igual que la delantera de Kelsi Monroe nunca haya sido su fuerte, menos aún después de ser madre, puesto que su poderoso tren inferior suple con creces cualquier carencia. Además, nos parece extremadamente sexy y atractiva, con su dentadura blanca e impoluta y su semblante siempre jovial. Lo de su culo estratosférico y sus piernas musculosas son palabras mayores, y, a sus 31 años, no se puede deber solo a la genética, sino que está claro que esta mujer se machaca en el gym para que ese trasero que ha hecho historia en la industria pornográfica siga luciendo irresistible, aunque sea en una escena POV rodada con escasos recursos técnicos o apareciendo de forma ocasional en los sets de rodaje profesionales. A tus pies siempre, Kelsi.
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