La que fue el máximo exponente del altporn años atrás, Bonnie Rotten, se vuelve a subir al escenario de la industria de adultos gracias a Brazzers. Se desconocen todavía los motivos de este glorioso comeback (si se ha cansado de ser madre o si necesita una inyección económica), pero esta noticia porno supone el regreso de una guarra de época, una marca registrada en el porno que deslumbró a toda la comunidad con su rebeldía y su inabarcable furor sexual. La presencia física de Bonnie es impresionante, no solo por su belleza animal, sino por esas tetas con tatuajes de telarañas y el resto de su cuerpo tan ilustrado. Motivos más que suficientes para saquear decenas de premios y crear toda una corriente de estética entintada en la pornografía de comienzos de siglo. La escena está a la altura de su prestigio: doble vaginal y anal, DP y su inconfundible chorro de squirting.