Para los que estamos familiarizados con el mundo erótico de Twitch, existe una streamer cuyo nombre es una parada obligatoria cuando se pasa por la categoría «Pools, Hot Tubs and Beaches». Nos referimos a la célebre Amourath, la última sensación de la plataforma (atiborrada de streamers, influencers y gamers) cuyas escalofriantes cifras demuestran su valía: 6 millones de seguidores y unos ingresos patrimoniales que se estiman en 1 millón de euros en apenas dos años, sin meter en el saco las donaciones y suscripciones. ¿Qué cómo lo ha conseguido? Fácil, grabando vídeos sexuales para Onlyfans.
Así es, amigos. Kaitlyn «Amouranth» Siragusa se ha convertido, por méritos propios, en la streamer de habla inglesa número 1 de Twitch por poner cachondos al personal masculino. La técnica más vieja de la historia de la humanidad. La joven estadounidense, que en un principio saltó a la fama como streamer y cosplayer de ASMR, ha encontrado el éxito en el lado oscuro de la pornografía, tal y cómo ya le sucedió a Belle Delphine cuándo fue tentada a experimentar con el erotismo virtual.
Lo que está claro es que las polémicas transmisiones de contenido de Amouranth han evolucionado y Twitch se le ha quedado pequeño a la hora de rar rienda suelta a su sexualidad contenida. Para la streamer de 28 años no es suficiente exhibirse con posturas sugestivas mientras juega a los videojuegos o lamer micrófonos como hacen las chicas de Youtube, necesita abrirse una cuenta en Onlyfans para sacar la ninfómana que lleva dentro.
Lo que en un principio eran simples retrasmisiones con ropa interior o directos en los que vestía un sexy bikini en una piscina hinchable, desafiando levemente las normas de conducta, se han convertido en varios vídeos pornográficos donde la celebridad Amourath hace felaciones, se desnuda completamente y hasta hace pajas cubanas metiéndose un pene entre sus grandes pechos. Material que sería baneado en Twitch por ir contra las buenas prácticas. Ahora entendemos porque la llaman la reina del «hot tub».
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