Aunque se muestra sonriente en sus escenas, la expresión natural de la novata Lucy Lotus es seria, incluso maliciosa. Una chica mala con un físico contundente, a la cual apetece castigar con unos buenos azotes y, por supuesto, con un buen surtido de pollazos en cada una de sus cavidades. Y es que sin ser la más guapa —tiene ese rostro agrio y severo de la profe más antipática del instituto—, proyecta un morbo adicional provocado precisamente por esa condición: es la típica hembra desaborida con buen cuerpo que no dudarías en follártela bien duro, como el que amansa a una fiera. Además, le va por el culo y le gusta la lefa, lo que suma muchos puntos en estas lides; y de trasero esta chica está perfectamente provista.
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