Recuerdo el día en que se estrenó la película española «Diario de una Ninfómana», una novela erótica escrita por Valérie Tasso y llevada a la gran pantalla allá por el 2008. La controvertida obra de cine narraba la adicción al sexo de una joven prostituta y que numerosos medios de comunicación la tacharon directamente de pornográfica. Lo cierto es que la protagonista principal del film —interpretado por las actrices españolas Alba Ribas y Belen Fabra según el marco temporal narrativo— tuvo que salir follando en más de una ocasión en actitudes bastante explícitas que dejaban muy poco a la imaginación.
Ambas actrices catalanas han confesado en alguna entrevista que se tuvieron que mentalizar para rodar las escenas, algunas de tan fuerte contenido erótico que hasta se podían comparar los vídeos que las pornostars pueden grabar en el cine de adultos. Y lo cierto es que no es para menos, en el erótico largometraje podemos encontrar cunnilingus en la ducha, sexo en mitad del pasillo, juegos con esposas, relaciones lésbicas, masturbaciones con botellas, frotamientos púbicos reales y todo tipo de servicios a los que tiene que atender una escort de lujo.
Es obvio que no es fácil meterse en un papel como este e interpretar a una mujer cuya vida esté rodeada de sexo las 24 horas del día. No en vano, Belén y Alba follando salen en pantalla más que convincentes, enseñando sus desnudos de cuerpo en varias ocasiones donde sus tetas y su vaginas deben aparecer por exigencias del guión. Podéis comprobarlo en esta versión extendida de todas las escenas, incluidas también las que sale desnuda Alba Ribas.
Cunnilingus a Alba Ribas en «Te Quiero, Imbécil» (2020)
El cunnilingus que le hace Quim Gutiérrez a Alba Ribas es tan auténtico que desde aquí casi que le olemos el coño.
Alba Ribas violada en «El Cadáver de Anna Fritz» (2015)
Que un enfermero pervertido y fetichista se folle a los cadáveres de la morgue no es violación. O eso es lo que sacamos en claro de la película.