Rafael Santillana
Cualquier pornófilo medio sabrá que las labores de dirección de Kayden Kross en Deeper están enfocadas en escenas pornográficas de alta alcurnia donde la estética refinada juega un papel principal. Un exceso de esteticismo del cual ya hablamos en JaqueMateAteos y al que suele ir parejo la pornostar Maitland Ward, una de las starlets contratadas del estudio. No obstante, esta tierra fértil para producciones artísticas acaba de estrenar «Muse», una película de varios capítulos en las que nos vemos inmersos gracias al morbo interpretativo de la fogosa starlet rojiza, que se mueve como pez en el agua en este tipo de encuentros sexuales grupales con argumentos.
Junto a ella, una que no suele prodigarse por estos terrenos, Adriana Chechik, en una pose sexual mucho menos letal a lo que nos tiene acostumbrados, donde no hará alarde su su ausencia casi total de límites, pero sí de sus grandes dotes interpretativas y belleza natural.
