Biografía de Dani Jensen
Como pelirroja que es, Dani Jensen posee una actividad sexual propia de un demonio flamígero. Su sello de identidad es ese matojo rojizo púbico que luce orgullosa cada vez que se la follan.
Dani Jensen está entre las mejores rojizas de la industria americana, pero no termina por destacar en lo más alto de este árbol de mujeres flameantes. Aun así no le podemos quitar lo que le corresponde: un aspecto dulce gracias a su actitud de pizpireta y docilidad de talla prudente.
La pelirroja de armas tomar aparte de su estética posee una serie de cualidades que le hace ganar muchos enteros en la industria de adultos. Y es que ha cedido al chantaje anal, ha jugueteado con la estaca de Lex Steele y hasta ha protagonizado una doble penetración.
Una serie de cualidades a las que tenemos que añadir ese gesto de malicia en la mirada cuando se pone cachonda como si fuera un ángel malvado de cabellos de fuego. Bajo su fachada de niña buena existe una auténtica pantera sexual que se merienda a todo hombre que se le ponga por delante.
En cuanto empezó a coger confianza en el porno, su ferocidad para follar fue creciendo dejando a un lado su lado tímido y reservado. De ahí que estudios populares como Brazzers cuenten con ella para multitud de escenas.
Su físico en el pasado no tuvo las medidas demenciales que tiene en la actualidad y por eso termino operándose los pechos postulándose así como una reina del cabello rojo con tetas más que decentes. Una delantera que aparte de lucir estupendamente combina muy bien con su matojo rojizo en su pubis.
Recientemente ha vuelto a disfrutar de una segunda juventud en el porno debido a la escena de su primer anal junto a Mike Adriano, el descorchador de ojetes. Un vídeo en el que no se escatima práctica cerda para ese majestuoso agujero que tiene nuestra starlet.
Sus excelsos dotes sexuales le han granjeado una legión de fans y, aunque no sea la pornostar más atractiva del panorama americano, tiene un duende único que la hace diferente.