Biografía de Alexis Brill
Alexis Brill es una pornostar húngara que también es escort de lujo. A ella mientras paguen le da igual follar en público o en privado, el sexo es trabajo
Lo primero que hacemos cuando aparece una nueva actriz porno como Alexis Brill es buscarla por internet.
Algunas novatas comepollas no son todavía muy conocidas y se sabe muy poco de ellas. Es el caso de Alexis Brill, una actriz húngara con una cara bella y unas medidas de escándalo.
Parece una tía que folla haciendo vídeos porno del montón, pero hay un secreto que lo ha escondido bien, y es que es puta. Así es, es una prostituta de lujo de esas que se promocionan haciendo porno.
De esta forma Alexis Brill sube el cache de su contratación y a cualquier hombre que se le pase por la cabeza pagar para follar con ella deberá adelantar una suma astronómica.
De hecho cobra la nada desdeñable cifra de 350€ por hora. Se puede decir que es una puta de lujo o una escort profesional. Por ese precio debe de chupar la polla de vicio y su culo lo debe abrir previo pago.
Por otra parte, siendo actriz porno es normal que su caché sea tan elevado, lo vale. No todo el mundo tiene la oportunidad y el placer de fornicar con una chica que sale en la televisión o en películas pornográficas.
Alexis Brill es fotogénica y queda genial cuando se le mete una polla o cuando le toca comer un coño. A ella le da igual carne que pescado, arriba o abajo, con un hombre o en plan orgía.
Las putas ya están muy rodadas y han visto de todo, su cuerpo es un trozo de carne del cual se puede abusar sin que ellas rechisten.
En este tipo de profesiones es normal que existan intrusismos profesionales, es decir, escorts de lujo reconvertidas en estrellas del porno, o actrices porno que pasan a ser putas para ganar algo más de dinero.
Da igual como sea, porque al final todo es lo mismo, ofrecen su cuerpo por dinero. Lo mejor que podía haber hecho Alexis Brill es compaginar todo tipo de labores para ganar pasta lo más rápido posible.
Ahora bien, si es que le gusta follar y además gana dinero con ello mejor que mejor. En Hungría no está la cosa para andarse con remilgos, si a una mujer se le da la oportunidad de tener sexo, aunque sea grabado y pagarle por ello lo hará sin titubear.