A sus 22 años, la letona de ojos azules almendrados y de maravillosos pechos naturales luce su bonita silueta en los sets de rodaje más prestigiosos del viejo continente. Con claras inclinaciones por el amor sáfico, aunque, por suerte, no le hace ascos a una buena polla en su vagina, la actriz báltica aparece en algunas de las producciones más glamurosas del circuito porno: Met-Art, Nubile, Lifeselector, Adultprime… Se lo puede permitir. Y es que su piel es perfecta y sin el más mínimo tatuaje o lunar. Además, el buen dinerito que ha recaudado en el porno hasta ahora, lo ha empleado para obtener la licenciatura de derecho en la Universidad de Riga. Un diploma que consiguió el año pasado cursando estudios a distancia, como manifestó en una entrevista realizada al productor Viv Thomas. Así que estamos ante una chica aplicada, lejos del patrón de chica libertina y pendenciera que se asocia a las féminas de este controvertido gremio.
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