A juzgar por el dulce aspecto de la dieciochoañera Dixie Lynn parece suscrita a ese porno hecho con la sangre de chicas de aspecto cándido, castas y vírgenes. Su imagen nos recuerda mucho a la adorable Trillium, aquella muchacha de tiernos pareceres que se convirtió en la píldora sexual del matromonio avenido por Alexis Fawx y Manuel Ferrara. Además su cuerpo matiza con fuerza la categoría que le corresponde, habiendo paseado su cuerpo como un cervatillo por productoras centradas en neófitas: BFFs, BangBros 18, Teamskeet… Recientemente el candor de Dixie ha servido en primera linea de fuego para que su culo sea despachado por el zampador de ojetes Mike Adriano, un tributo muy juvenil que Mike ha sacrificado en consabido altar pornográfico de True Anal.
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