Valentina Jewels ha aparcado su tembloroso y enorme trasero para llevar a cabo ese morboso concepto que tienen en mente algunos amantes de las pornostars de poder contactar con ellas y probar en sus carnes como es eso de follar con sus ídolos femeninos. Una copia de la exitosa fórmula «Challenge Mea» en el que Mia Melone humillaba sexualmente a los candidatos provocando un recital de disfunciones eréctiles y gatillazos. En este caso ha sido en el set de BangBros donde 10 sementales elegidos al azar tendrán la oportunidad de recibir una sesión de sexo oral por parte de la miamense. Toda una prueba enfrascada en el porno más bizarro y surrealista para la atrevida latina en la que no puede faltar el condón reglamentario al no tratarse de actores profesionales.