Recuerdo cuando la pornostar Brandi Love se negaba a trabajar con actores afroamericanos y figuraba en la lista negra de mujeres que profesaban ideología de dudosa moralidad. Así fue al menos hasta que su primer interracial con el príncipe afroeuropeo Joss Lescaf se estrenó en 2016 y se despejaron todas estas dudas acerca de su supuesto racismo laboral. Mucho ha llovido desde entonces y sus devaneos raciales se han multiplicado hasta el punto de protagonizar intensos tríos en Blacked y probar la colosal polla de Mandingo. Sin embargo, pese a sus proezas sexuales en terreno interracial, la impresionante Milf —que a estas alturas ya es una madura por ley (tiene 46 añazos)— todavía le falta por realizar un anal en su larga carrera.
Y es que después de todo el anal es el tópico que marca la diferencia entre una gran actriz y el resto, algo que se echa en falta en su último trabajo en Blacked Raw, su interpretación más sucia y guarra por cierto,