A los que se licenciaron en la universidad conocerán de primera mano aquellas disparatadas fiestas sexuales que veíamos en las películas americanas del estilo de «Porkys» o «American Pie». Fue nuestra época de mayor plenitud debido a esos últimos rescoldos hormonales postadolescentes además potenciados por el libertinaje típico del Alma mater. Al menos así sucede en América donde el libertinaje sexual en el campus y fraternidades se transmite de promoción a promoción. Con la llegada de los móviles y las novedosas redes sociales como Snapchat que basan su éxito en parte por el famoso refrán de «Lo bueno si es breve dos veces bueno», se han inmortalizado en formato digital estos excitantes vídeos cortos que nos muestran una profusa vida sexual en ambientes eroticofacultativos abarrotados de alcohol.