El tirón mediático de esta revolución sexual en cuanto a abrir las barreras morales del sexo incestuoso ha provocado que un aluvión de estudios se sumen a esta moda. Uno de tantos es Bratty Sys, creado ex profeso para tales menesteres y diseñado al milímetro para explotar esta fiebre en el porno entre parientes y familiares. En su umbral se agolpan pornostars jovencitas que pretenden subirse al carro del éxito, como Izzy Bell, una adorable actriz que con tan solo 21 años deja meridiano a su hermano que quiere cabalgarlo hasta altas horas de la madrugada. Vestida únicamente con sujetador y bragas y sentada al regazo de la cama clama por catar su polla. Como muchas en su edad no pueden controlar sus emociones de niña malcriada y no sabe que provoca una incómoda situación sexual.